
La corrupción es un grave problema que el Gobierno solo está dispuesto a administrar, no a combatir. Y esto es sumamente grave, pues este cáncer genera un escepticismo sobre el valor de la democracia, la pertinencia del modelo económico y la credibilidad en la justicia, pilares sobre los que descansa el Estado. Son estas las razones por las cuales son un freno al desarrollo, como dice Andrés Oppenheimer ("Ojos Vendados"), en tal...